Todos hemos cantado, chupado o llorado al menos una vez con alguna canción de Ricardo Arjona; es cierto, pero, ¿Alguna vez nos hemos puesto a pensar qué hay detrás de este controversial personaje?
Empecemos; como todos los artistas, Arjona comenzó su carrera de una manera humilde, esforzándose al extremo y componiendo sus propias canciones, como "Te conozco" o "Si el norte fuera el sur"; son buenas, nadie lo puede negar. Sin embargo, con el tiempo, Arjona aprendió una lección muy valiosa "Si una fórmula tiene mucho éxito, no hay razón alguna para cambiarla" Y es así que el resto de sus composiciones son, de una u otra forma, lo mismo: los mismos acordes, la misma armonía, las mismas metáforas, que en muchas veces no tienen sentido alguno, por ejemplo "pingüinos en la cama" ¿Acaso no suena un tanto vacío?
Y de esa forma, Arjona pasó de ser un buen compositor a un simple producto de mercado que utiliza una estrategia que ya ha tenido éxito y que ha ganado mucha fama con ello. Lamentablemente, tambíen ha perdido (como muchos famosos) su humildad. Es por ello que pidió exclusivamente estrenar un hotel con un sinnúmero de lujos a condición de venir a nuestro país.
Un poco exagerado, ¿No es verdad?
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